( Continuación)
Si señor, allí estaba, en la puerta de Sabina, Canon ixus en mano y currículum. Pensé y empecé a inmortalizar ese momento con mi cámara y en la segunda foto a su morada se acerco una señora enfuscada, su mirada fue fulminante, peor que la mirada de la Guia turística dicharachera y este fue el siguiente dialogo:
- Chaval, ¿Que haces? Guarda la cámara, aquí no puedes echar fotos.
- Ah, no es que...
- No, así que si estas esperando al quien creo que esperas, no esta, así que vete o llamo a la policía.
Al oír policía, me vino un ardor, proveniente de los finger del almuerzo y la vergüenza y huí como perro lastimado. Dado mi ardor y mi cansancio decidí tomarme un refrigerio, y se interpuso en mi camino un star bucks, mi primera vez en uno de esos. Decidí probar sus cafés y entre a ver lo que ofertaba. Fui como un niño en un Carrusel, nerviosismo al no saber que pedir, a si que me decidí por un frapuccino combinado a mi manera...Era magia! a un simple café podía añadir sirope, elegir tamaño, elegir tipo de leche, nata o sin nata....tal fue mi tuneo al café que me cobraron 5, 70. Volvió los ardores al ver el precio del café y en ese momento, la señorita me pregunto mi nombre ¿me dices tu nombre? Imagine que me lo pidieron por que fue una compra grande, 5,70 un café? me quede esperando que me pidiera el nombre de un aval y una fianza. Pero no, era para avisarme cuando mi café estara listo. Decidí tomármelo de camino a Alcalá...solo me quedaba que un indignado de la plaza del Sol me pegara. No podía mas, así que decidí irme de Madrid a Alcalá y en ese trayecto me puse mi música y no supe nada mas, entre en un trance de retorcijones, ardores
y vergüenza. Llegue a Alcalá y termine el día como pude. Al día siguiente toco cagalera y parte de esa cagalera se la dedique al pobre hombre que me pidió dinero aquella tarde en el cercanías y su maldición...FIN
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